El estrés diario puede convertirse en una carga física, manifestándose en forma de tensión y dolor en el cuello y los hombros. Si pasas muchas horas frente al ordenador, tienes una rutina sedentaria o simplemente sientes que el peso del mundo recae sobre ti, es probable que esta molestia te resulte familiar.
Afortunadamente, existen ejercicios simples pero poderosos que pueden ayudarte a liberar esta tensión, mejorar tu postura y devolverle movilidad a tu cuerpo. A continuación, te compartimos una rutina efectiva para aliviar el dolor y sentirte más relajado.
1. Estiramiento de trapecios
Los músculos trapecios, ubicados entre los hombros y el cuello, son los más afectados por el estrés. Para liberarlos:
- Siéntate o párate con la espalda recta.
- Inclina la cabeza hacia un lado, acercando la oreja al hombro sin levantar los hombros.
- Mantén la posición por 20-30 segundos y cambia de lado.
- Puedes aumentar la intensidad colocando una mano sobre la cabeza y aplicando una leve presión.
2. Rotaciones de cuello
Este ejercicio mejora la movilidad cervical y reduce la rigidez:
- Mantén la cabeza erguida y los hombros relajados.
- Gira la cabeza lentamente hacia la derecha, como si miraras por encima del hombro.
- Sostén la posición unos segundos y regresa al centro.
- Repite hacia el lado izquierdo. Hazlo 5 veces por lado.
3. Encogimiento de hombros
Un ejercicio sencillo pero muy eficaz para liberar la tensión acumulada:
- Inspira profundamente y sube los hombros hacia las orejas lo más alto posible.
- Mantén la contracción por 5 segundos.
- Exhala y suéltalos bruscamente, como si dejaras caer todo el peso.
- Repite 10 veces.
4. Estiramiento de hombros y pecho
Abrir el pecho ayuda a contrarrestar la postura encorvada y aliviar la presión en los hombros:
- Lleva ambas manos hacia la espalda y entrelázalas.
- Estira los brazos hacia atrás y levanta ligeramente el pecho.
- Mantén por 20 segundos y suelta.
5. Postura del niño (yoga)
Un estiramiento relajante para toda la espalda y hombros:
- Arrodíllate en el suelo y siéntate sobre los talones.
- Estira los brazos hacia adelante y apoya la frente en el suelo.
- Relaja el cuello y respira profundamente durante 30 segundos.
Conclusión
La clave para reducir el dolor de cuello y hombros causado por el estrés es la constancia. Dedica unos minutos al día a estos ejercicios y notarás una gran diferencia en tu bienestar. Además, combina esta rutina con pausas activas, una buena postura y técnicas de respiración para potenciar sus beneficios. ¡Tu cuerpo te lo agradecerá!
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