Sin saber cómo pasar la tarde del viernes, decidí llamar al concesionario de motos segunda mano Crestanevada para probar la versión 2006 de la Tuono. Derivada directamente de la RSV de 2006, tiene el mismo chasis y el motor de 60º que desarrolla 133 CV en versión de pista. Los carenados han desaparecido y un manillar ancho sustituye a los tirantes.
Me presento una hora después en el concesionario, relleno el papeleo y descubro la moto que voy a probar en todas las direcciones. Aunque la parte trasera es espléndida, la delantera es un poco especial. Esta cabeza de horquilla es realmente una cabeza de avispa.
Me pongo a los mandos. El manillar es muy ancho. Pruebo la accesibilidad de los diferentes botones. Salvo los indicadores, todo cae bajo los dedos sin ningún problema. El velocímetro tiene una gran pantalla digital donde todos los datos (velocidad, temperatura, tiempo, recorrido) son claramente visibles. El contador de revoluciones está a la izquierda. El conjunto se completa con una luz de cambio mono led.
Arranco el motor. El bicilíndrico resopla y los leovinces escupen sus decibelios. » Le pregunto al concesionario: «¿Están homologadas sus escapes? Él responde que sí. Es suficiente para que te arresten nuestros amigos de la policía y ni siquiera he dado 1500 vueltas.
Así que salgo del concesionario con un poco de maniobra. El radio de giro es realmente grande, lo que no es práctico para los giros en U. Como es habitual, la prueba comienza con la conducción en ciudad. Esto permite que el motor se caliente lentamente. También nos permite probar la agilidad de la moto. La moto se balancea de lado a lado con extrema facilidad. El manillar ancho ayuda mucho en esta tarea. Luego veré cómo va en las secuencias más o menos rápidas.
Puedo abrirme paso fácilmente entre los coches, que se apartan rápidamente al oír el sonido de los 1000. Hay que jugar con la caja de cambios, que es muy buena, ya que las bajas revoluciones no son el fuerte de este motor. También es posible que esta sensación se deba a mi falta de familiaridad con el bicilíndrico. La parada en los semáforos se ve alterada por la posición de las ruedas. Se colocan justo en el lugar donde se apoyan las piernas, lo que significa que tienen que estar un poco separadas.
En la última rotonda, compruebo la temperatura del motor, echo un vistazo al cuentavueltas que muestra unas tímidas 3500 rpm y decido girar la manivela. Como una bala de cañón, arranco de la rotonda, que me abre las puertas del paraíso. El enorme par del motor me catapulta a las primeras curvas de la subida. Corto el acelerador, reduzco la velocidad lo más rápido posible gracias al enorme par motor y la acción sobre el ancho manillar me pone en la senda correcta en un santiamén.
La agilidad que sentía en la ciudad está aún más presente ahora que el ritmo es un poco más sostenido. Dejé que el Dunlop se calentara. Llego a la primera horquilla de la izquierda y aún no he tocado la palanca de freno. La primera sensación es muy buena. La primera sensación es muy buena, un ataque limpio y una muy buena progresividad. Sin embargo, no debes olvidar bajar una marcha o te quedarás temblando. Al motor no le gustan las revoluciones muy bajas. Hago 4 o 5 km tranquilamente hasta que los neumáticos estén en su mejor momento.
Esta vez, todo está caliente, podemos ir. Una horquilla a la derecha y nos vamos. El acelerador está a tope y noto que el tren delantero se aligera un poco, pero el amortiguador de la dirección sigue ahí. La moto no se mueve ni un centímetro. En la recta, tiro del 2, paso del 3 a 11000 rpm y tira una y otra vez. Realmente impresionante. Todavía tengo que cortar para una gran izquierda. La moto se asienta tan rápido como toco el manillar. Siguen una serie de giros que pasan como si nada. La moto es realmente fácil de manejar. Me siento confiado de inmediato. Luego viene un gran freno.
Motor: El par motor de 60º en V es realmente agradable. Aunque carece de la flexibilidad de un motor de 4 cilindros a bajas revoluciones, su par motor sigue siendo muy cómodo en torno a las 4.000 rpm. Restringido a 100 CV. (en lugar de 133 en total) ofrece muy buena captación y una extensión muy correcta. La versión completa debe ser un monstruo. El sonido que sale de los 2 potes es muy agradable. No sé cómo suena en la versión de stock pero las leovincias funcionan muy bien.
Chasis: No hay nada especial que decir. La posición es muy agradable y cómoda. De pie, con las piernas un poco flexionadas, se siente muy deportivo. La rigidez del bastidor, combinada con la muy buena suspensión, permite tomar curvas de montaña sin aprensión y sin reacción parásita.
Frenos: El sistema de frenos radial completo proporciona un muy buen ataque y una dosificación precisa. La moto no se endereza al frenar en una curva. Sin embargo, la parte trasera es inexistente.
Otros: La protección que ofrece la burbuja opcional es muy buena. La pata de cabra es incómoda de poner y la posición de las ruedas es realmente molesta.